Los jardines pueden ser víctimas de una variedad de insectos molestos que amenazan la salud de las plantas. Para proteger tus cultivos de forma natural y efectiva, aquí tienes nueve consejos probados:
- Bórax y Miel: Mezcla bórax con miel para atraer y eliminar cucarachas, hormigas y termitas. Coloca esta mezcla en áreas estratégicas del jardín, manteniéndola fuera del alcance de niños y mascotas debido a su toxicidad potencial.
- Vinagre: Utiliza vinagre blanco o de sidra con aceite esencial de menta en un atomizador para repeler mosquitos tigre, chinches y pulgones rociándolo sobre las plantas.
- Cáscaras de Huevo: Tritura cáscaras de huevo para usarlas como fertilizante y proteger el suelo de las plagas.
- Posos de Café: Esparce posos de café alrededor de tus plantas para repeler insectos que no soportan su olor.
- Aceite de Árbol de Té: Mezcla unas gotas en agua y rocía esta solución para repeler mosquitos y otros insectos rastreros.
- Sal de Epsom: Úsala para combatir insectos y calmar picaduras de mosquitos, rociándola sobre las plantas afectadas.
- Bicarbonato de Sodio: Espolvorea bicarbonato de sodio sobre las plantas para repeler plagas junto con aceite esencial de eucalipto y limón para potenciar su efectividad.
- Monedas de Cobre: Coloca monedas de cobre en el suelo o sobre las plantas para actuar como fungicida y repelente de insectos.
- Agua de Coco: Riega con agua de coco para estimular el crecimiento de tus plantas y protegerlas de plagas menores.
Implementa estos métodos naturales para mantener tu jardín libre de insectos no deseados y promover un crecimiento saludable de tus plantas.