Introducción: Cultivar cebollas verdes sin necesidad de un jardín convencional es más que una posibilidad: es una realidad sorprendentemente accesible y conveniente. A través del ingenio y la reutilización de materiales, podemos crear un sistema hidropónico en casa que nos permitirá cosechar cebollas frescas cada dos semanas durante un prolongado período de hasta seis meses. Este método no solo es sostenible, sino que también ahorra espacio y garantiza un suministro constante de cebollas crujientes y sabrosas.
Materiales necesarios:
- Botellas de plástico de 5 litros (limpias y vacías)
- Bandeja de plástico que quepa dentro de la botella, pero solo a nivel de la superficie
- Bulbos de cebolla roja o amarilla con la parte superior cortada
- Cuerda
- Envoltura de plástico
- Agua
El sistema hidropónico:
- Preparación de las botellas: Corta las botellas de plástico por la mitad horizontalmente, conservando la parte superior para usarla como contenedor. La mitad inferior será el depósito de agua.
- Preparación de la bandeja: Coloca la bandeja de plástico dentro de la mitad superior de la botella, asegurándote de que encaje correctamente. Perfora varios agujeros grandes en la bandeja para permitir el flujo de agua.
- Configuración de la cuerda: Pasa una cuerda a través de los agujeros de la bandeja, asegurándote de que llegue al agua en el depósito. Esta cuerda actuará como una mecha para transportar agua a las raíces de las cebollas.
- Preparación de las cebollas: Corta la parte superior de los bulbos de cebolla y elimina las raíces muertas. Coloca las cebollas en la bandeja, asegurándote de que la parte de la raíz esté en contacto con la cuerda.
- Crea un invernadero: Cubre la parte superior de la botella con envoltura de plástico para crear un efecto invernadero, lo que acelerará el crecimiento de las cebollas.
- Mantenimiento: Mantén el depósito de agua lleno para que la cuerda pueda suministrar agua a las raíces de las cebollas.
Cosecha: En aproximadamente 14 semanas, las cebollas estarán listas para ser cosechadas. Córtalas cuidadosamente según sea necesario, dejando el bulbo y las raíces intactos. Las cebollas continuarán creciendo, lo que te permitirá disfrutar de múltiples cosechas durante varios meses.
Conclusión: El cultivo de cebollas verdes sin necesidad de tierra tradicional es una forma accesible y sostenible de jardinería. Reutilizando materiales simples, podemos mantener un suministro continuo de cebollas frescas durante todo el año. Este método no solo es ecológico y eficiente en términos de espacio, sino que también nos brinda la satisfacción de cultivar nuestras propias hierbas. ¡Prueba este método y comparte la experiencia con amigos y familiares!